El genio de la bicicleta


Sergio Saturno es uno de esos futbolistas talentosos que se forman en el torneo argentino, adquieren la genialidad, la garra y la rapidez mental que son marcas registradas del nacimiento, futbolisticamente hablando, en suelo albiceleste.
Sería valedero e informativo hablar de los clubes en los cuales desarrolló su trayectoria como jugador de fútbol, Rosario Central (1985), Lanús (1986-87), Gimnasia L.P (1987-89), Huracán (1989-91), Boca Juniors (1992-93) y Platense (1994-95). Aunque lo interesante de este personaje no es su vida como futbolista sino una cualidad especial con la que cuenta este puntero derecho o “Wing” que es la que lo resalta por encima de otros...LA BICICLETA.
Como explicó en varios medios, su obra maestra, la famosa bicicleta de Saturno, se dió por obra de la naturaleza, instintivamente y aún más sorprendente, no se sabe cual fue la primera bicicleta de este genial deportista. “Hice desde siempre la bicicleta, desde que empezé a jugar. Nadie me la enseñó” señala “La larva”, apodo que le pusieron Blas Giunta y el “Beto” Márcico en su paso por Boca Juniors. Comparando su particular habilidad con las de otros jugadores, sostiene: “La bicicleta era para mi lo que una genialidad para Márcico y un buen quite para Blas”. Su marca registrada era conocida por todos, se llegó a decir que la gente iba a ver el partido para presenciar el momento mágico cuando ocurría “la bicicleta”, los rivales sabían que iba a hacer su jugada pero no sabían cuando, entonces no le podían tomar la mano. Oscar Washington Tabárez, que lo dirijió en Boca Juniors aseguró que “hacía cosas imprevisibles, que ni yo sabía que iba a hacer, pero siempre había sido así”.

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